Encuentro de trabajadoras y trabajadores del Organismo Provincial de la Niñez y Adolescencia
Desde la Dirección Ejecutiva les damos la bienvenida al encuentro de trabajadoras y trabajadores del OPNYA “Niñeces y adolescencias desde una perspectiva de género”. La presente sensibilización, tiene por objetivo incorporar la perspectiva de género en las prácticas cotidianas para poder así garantizar de manera integral los Derechos de las/los NNyA. Este encuentro, realizado por el equipo del Área de Géneros y Diversidad, se enmarca en una de sus líneas de trabajo esto es, la de crear instancias de formación para construir estos saberes y profundizar y transversalizar las políticas para erradicar la violencias por razones de género en las Niñeces y Adolescencias.
Versión PDF del encuentro Históricamente el paradigma del patronato ha colocado a las niñeces y adolescencias como
sinónimo de menores, incapaces, sin voz, sin participación o deseos propios, es decir, como objetos de
protección del Estado y de la sociedad en general. Desde la implementación de la Ley Nacional N° 26.061 de
Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes y la Ley Provincial Nº 13.298 de
Promoción y Protección Integral de los Derechos de los Niños, se han hecho grandes avances para revertir la
mirada que la sociedad y las instituciones del Estado, tienen sobre las niñeces. Este nuevo paradigma
reconoce a las niñeces y adolescencias como sujetos de derecho, con
autonomía progresiva1, con derecho a ser oídos en sus propios deseos.
No obstante, es posible encontrar en el Sistema de Protección y Promoción de Derechos restos de aquel modelo
de patronato en las desigualdades que son propias del Patriarcado, que se manifiesta en la discriminación,
exclusión y violencias contra las niñeces y adolescencias.
En las sociedades patriarcales como la nuestra, donde existe una desigual distribución de poder que establece el sometimiento de las mujeres respecto de los hombres, se sostiene sobre un régimen normativo respecto al género y la sexualidad: la heteronorma. Este modelo, que está presente en cada aspecto de la vida de las personas, define cuáles son las identidades de género aceptadas, así como también, castiga, expulsa y discrimina aquellas que no lo son.
La heteronorma, es un sistema que a través de sus prácticas institucionalizadas, delimita y naturaliza sólo dos identidades sexuales: hombre y mujer, como los únicos modelos ideales donde existe una “correcta coherencia” entre deseo, sexo biológico y género. A esto se lo conoce también como sistema binario o binarismo de género.
Es decir, este sistema, premia, vigila y propicia que el varón sienta deseo por las mujeres, tenga genitalidad masculina y se autoperciba hombre; y en consonancia, se espera que las mujeres sientan deseo hacia los hombres, tengan genitalidad femenina y su autopercepción se corresponda con el sexo asignado al nacer.
Este mandato se establece y refuerza por diversos mecanismos de violencias presentes en la vida pública y privada, en las instituciones, en los sistemas de valores sociales y culturales. Se trata de imposiciones que permiten sólo dos modelos posibles y anula e imposibilita la verdadera diversidad de ser niñas, niños, niñes y adolescentes.
Comprende el conjunto de características sexuales corporales (hormonales, cromosómicas, fisiológicas o anatómicas, entre otras), que se asocian comúnmente a lo femenino y masculino y de acuerdo a las cuales se les asigna a las personas un género al nacer: varón/mujer.
En contraposición, la Diversidad de género o diversidad sexo-genérica reconoce que bajo este aspecto se da una amplia gama de variaciones, es decir, personas que nacen con características sexuales que varían del promedio femenino o masculino y se expanden más allá del binario hombre-mujer, dando lugar a las identidades Intersex.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA, propone entender la orientación sexual como la capacidad de cada persona de sentir una profunda atracción emocional, afectiva y sexual por personas de un género diferente al percibido, el mismo o más de un género. Es decir, está relacionada con los vínculos sexo-afectivos que se construyen con las/los otras/os.
La heterosexualidad, identifica a las personas que sienten deseo por el sexo opuesto, y es a la vez, la orientación establecida con fuerza por la heteronorma, pero la Diversidad sexo-genérica visibiliza en cambio, todas las posibilidades de vinculación sexo-afectiva que se da entre las personas y que se expresan en las identidades: lesbianas, gays, bisexuales, pansexuales, asexuales, demisexuales, etc.
Dentro del marco heteronormativo, el género se constituye por todas aquellas prácticas, roles y sistema de valores asociados al sexo biológico. La heteronorma establece una imposición que ubica a las mujeres en un rol social determinado, una expresión de género relacionado con la sensibilidad, la delicadeza, la debilidad, emocionalidad, pasividad, etc.; mientras que los hombres ocupan un lugar en la sociedad de acuerdo a características muy distintas: la fuerza, el control, la racionalidad, ser proveedores, competitivos, etc.
En relación a lo antedicho, los movimientos feministas y los conocimientos en torno a estos procesos, han desarrollado mecanismos para desentramar este modelo, por un lado, detectando cómo la sociedad y la cultura, premian el lugar destinado a los hombres que cumplen con tales características, mientras que destina un lugar de inferioridad a las mujeres, siendo las tareas que desarrollan, minimizadas y no reconocidas en los mismos términos (económica, social y culturalmente).
De esta manera, se ha identificado que esta serie de características se establecen como naturales (ligadas al sexo biológico), para ser obedecidas y acatadas sin cuestionamientos, cuando en realidad, son construcciones culturales que cumplen una función: la de sostener un sistema de dominación y desigualdad.
Surge como una construcción social, cultural y política, y lo hace desde una mirada plural que incluye la multiplicidad de los cuerpos, identidades y orientaciones sexuales, sin organizarlas de manera jerárquica (ninguna es superior o preexistente), y tomando como horizonte el derecho a la autopercepción de las personas.
Nuestra Ley 26.743 define a la identidad de género como “la vivencia interna e individual del género tal como cada persona la siente, la cual puede corresponder o no con el sexo asignado al momento del nacimiento, incluyendo la vivencia personal del cuerpo. Esto puede involucrar la modificación de la apariencia o la función corporal a través de medios farmacológicos, quirúrgicos o de otra índole, siempre que ello sea libremente escogido. También incluye otras expresiones de género, como la vestimenta, el modo de hablar y los modales”.
De esta manera, mientras la heteornorma sólo reconoce dos géneros/sexos: varón-mujer, la diversidad de sexo-genérica visibiliza en cambio otras identidades:
Cis: refiere a las personas que se identifican con el sexo que les fue asignado al nacer. Es importante señalar que este concepto fue creado y difundido por el movimiento trans con el sentido político dedesnaturalizar las definiciones de varón y mujer, y presentarlas así como construcciones que son culturales, parciales y marcadas por experiencias particulares. De esta manera, varón y mujer se expresan bajo esta perspectiva como varón cis y mujer cis, reconociendo que no son géneros preexistentes, sino que se relacionan con la autopercepción de cada persona respecto al sexo biológico.
Transgénero: Incluye a las personas que se identifican con un sexo opuesto al que se le asignó al nacer y que, por lo general, desean modificar algunas de sus características corporales través de intervenciones quirúrgicas o tratamientos hormonales.
Queer: Es un término de origen anglosajón que ha sufrido profundos cambios en su significación. Originalmente el término era empleado para señalar de forma despectiva a las personas homosexuales, pero luego fue tomado y resignificado por estos colectivos y adquiriendo significancias políticas e identitarias.
Actualmente se puede decir que es utilizado por aquellas personas cuya identidad de género no está incluida o trasciende el binario varón y mujer, así como también como posición ideológica contra el binarismo hegemónico incluyendo todas las identidades del colectivo LGBTIQ+.
Es el conjunto de manifestaciones de nuestro género que se hacen presentes en nuestros comportamientos y apariencia. Estas expresiones muchas veces se ajustan a lo que socialmente se espera para su género, y muchas veces no, es decir, la expresión de género de una persona no siempre está vinculada con su sexo biológico, su identidad de género o su orientación sexual.
La expresión de género puede ser masculina, femenina, andrógina o cualquier combinación de las tres.
a continuación un video Diversidad sexogenérica y el sistema Heteronormativo:
En el punto 1. Se ha identificado el Patriarcado como un sistema de dominación contra las mujeres e identidades no binarias, de la misma manera que se ha definido la heteronorma, como el orden impuesto por el mismo.
Los mecanismos que sostienen este sistema, lo hacen a través de las violencias por razones de género.
La Violencia por razones de género , es aquella ejercida contra las mujeres, lesbianas, travestis y trans, que responde a la lógica del Patriarcado, es decir, aquella que sostiene al varón hetero cis (ver en conceptos clave) en un lugar dominante sobre las otras identidades mencionadas.
Los movimientos feministas comenzaron por problematizar la violencia doméstica, estableciendo que las vulneraciones de las que son víctimas las mujeres en la vida íntima de una pareja o de su hogar, tenían una correlación con la vida pública correspondiéndose con el sistema social impuesto, es decir, con el Patriarcado.
En este sentido, recordemos que una de las máximas del feminismo postuló: ‘lo personal es político’, frase que sintetizó esta ruptura de paradigma interpelando el sentido común. De esta manera, las violencias del ámbito privado, al ser mecanismos que reproducen un régimen social, exceden la esfera íntima y constituyen un problema público. Por esta razón, las violencias por razones de género se constituyen como una problemática a ser atendida por los Estados.
Por tal motivo, Argentina suscribe a múltiples tratados internacionales, y ha desarrollado además leyes propias como:
La violencia es una de las máximas expresiones de vulneración de derechos contra las niñeces y adolescencias. Se entiende a las violencias contra niñeces o adolescencias a cualquier acción, omisión o trato negligente, no accidental, que prive a la niña/o o adolescente de sus derechos y su bienestar, que amenacen y/o interfieran su ordenado desarrollo físico, psíquico y /o social, y cuyos autores pueden ser personas, instituciones o la propia sociedad. Las características que definen estas conductas como maltrato son: la asimetría de poder, la cronicidad, la intencionalidad y la intensidad creciente. 1
Una asimetría a tener en cuenta en las violencias contra las niñeces es la prevalencia de un sistema adultocentrista. Nuestra sociedad y cultura favorece y privilegia a las/los adultas/os dando lugar a relaciones de poder entre los diferentes grupos de edad que son asimétricas en favor de éstos. Es decir, esta clave analítica ubica en una posición de superioridad a las/los adultas/os, siendo esto un agravante en el ejercicio de las violencias contra las niñeces.
La violencia por razones de género contra las niñeces y adolescencias es aquella que expresa una asimetría de poder respecto al género. En esta, se manifiesta la desigualdad propia del orden heteronormativo a través de distintas formas de violencia (física, verbal, psicológica, simbólica, económica) ejercidas contra las NNyA 2.
Desde temprana edad, se naturalizan prácticas que refuerzan los estereotipos a través de la reproducción de los roles sociales asignados según el sexo asignado al nacer de la NNoA. En este sentido, por ejemplo, a las niñas y adolescentes se les atribuye la responsabilidad de realizar ciertas tareas del cuidado de otros integrantes del grupo familiar, así como también tareas de limpieza del hogar, además de mandatos social y culturalmente reproducidos de feminidad3, estereotipos de belleza y de cosificación sobre sus cuerpos.
El “deber ser” que socialmente, a través de la cultura que las niñas y adolescentes atraviesan, son formas de reproducción de una violencia simbólica ejercida por razones de género.
Pueden darse situaciones de violencia por razones de género dentro del mismo grupo familiar o de convivencia contra otros integrantes, de los cuales son también víctimas de forma indirecta. Esto puede dejar consecuencias físicas, emocionales, psicológicas y socioeconómicas, que pueden perdurar y/o agravarse en el tiempo. En este sentido, es imprescindible generar acciones integrales para su abordaje.
En este marco el Área de Géneros y Diversidad, se propone como finalidad incorporar en las políticas del Organismo una mirada que permita reducir las desigualdades de género,presentes en dispositivos, programas y prácticas, y poder garantizar a todas/os las/los niñas/os y adolescentes las mismas condiciones y oportunidades para alcanzar su pleno desarrollo. El eje principal es la integración, en todos los planos y niveles de acción del OPNYA, de estrategias que aborden la discriminación y las desventajas relacionadas al género.
Para la consecución de este objetivo es necesario desarrollar acciones transversales, integrales y coordinadas que permitan revisar desde una perspectiva de género las prácticas y políticas actuales y desarrollar nuevas estrategias que contengan esa mirada. Todo aquello que se construya hoy tiene impacto en el futuro, y es bajo esta premisa que asumimos como Estado la Promoción y Protección de Derechos.
A continuación presentamos el Área de Géneros y Diversidad del OPNYA:
Material producido por el Área de Géneros y Diversidad del OPNYA. Se autoriza la reproducción parcial o total y la difusión del documento con propósitos educativos, sin fines de lucro y sujeto a que se cite la fuente.
Para la certificación del encuentro les solicitamos presentar por escrito a través del formulario de google el siguiente ejercicio:
https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLSeWA8z_Vr1uKRwhwVGNq2WsJVq9nO1bI7ge-rcbxr-XiBQCsQ/viewform?usp=sf_link